Una vez que ha elegido la tecnología, la anchura del papel es, sin duda, el siguiente punto importante. ¿Qué anchura desea que tenga la impresión? Por ejemplo, no puede elegir una impresora con una anchura de 60 mm, si planea imprimir en un papel de 80 mm de ancho. Siempre que sea posible, use el papel más estrecho con una anchura habitual que pueda, porque el papel más estrecho es en general más económico.
Obviamente, su aplicación puede requerir la anchura; por ejemplo, si va a imprimir billetes de ferrocarril, tiene que cumplir con los estándares de dichos billetes. Otro factor es la facilidad de lectura que tendrá la impresión y cuánta información contendrá. Sería difícil poner un mapa detallado de Manhattan en una impresión de 60 mm de anchura; para algo como eso, es preferible una anchura de carta completa (13 centímetros) o una impresión a tamaño A4.
Las diferentes empresas en general especifican el papel que emplearán sus impresoras de una o dos maneras. Se mide bien según su peso o según su grosor porque ambos valores se relacionan entre sí. El peso del papel normalmente usa gramos/metro cuadrado (g/sqm, g/m²). El papel de factura normal ronda los 55-60 g/m². Los fabricantes de papel prefieren especificar el “calibre” de un papel por su grosor en miligramos (unidades de miles de gramos) o micrómetros (µm, 1 miligramo= 25.4 µm) porque así es lo que pueden controlar con más precisión en el proceso de fabricación (y usted puede medirlo con más facilidad). El grosor del papel y el peso pueden convertirse transversalmente. El ejemplo de la regla de oro para papel térmico es: 100 g/m2 → 4.3 miligramos o 1 miligramos → 23 g/m2.
Como nuestro objetivo no es darle una formación sobre papel térmico, digamos solo que el grosor normalmente trata de la durabilidad, el coste y el valor percibido. Si es necesario que la impresión sea duradera (por ejemplo, si el usuario la pone en el bolsillo para sacarla y enseñarla más tarde), de alguna manera debería ser más gruesa. El grueso exacto depende de cómo se maneje la impresión. El papel más fino generalmente es más económico, pero el papel que no es tan fino tiende a atascar la impresora
El equipo de HENGSTLER es experto en combinar impresoras con la aplicación. Tanto si son para facturas de bombas de gas, impresoras para extractos bancarios, sistemas de impresión de billetes de ferrocarril, kioscos, sistemas contraincendios o cualquier otra cosa, lo hemos visto y podemos ayudar a localizar e integrar la impresora que mejor se adapte para la finalidad que se requiere. Además, podemos dar soporte a nuestros clientes de forma efectiva ofreciendo proyectos de aplicación personalizados. Póngase en contacto con nosotros hoy con su aplicación o desafío.
